Fiscales concluirán el caso del asesinato de Selena esta semana
La defensa espera llenar los vacíos de su argumento
Tomado del artículo de PATTY REINERT Derechos reservados 1995, Houston Chronicle
10:06 PM 10/15/1995
Mientras la segunda semana del juicio del asesinato de Selena comienza hoy, los abogados defensores esperan cubrir grandes vacíos que se le hicieron a su argumento de que Yolanda Saldívar estaba tratando de suicidarse cuando le disparó accidentalmente en la espalda a la estrella tejana.
La semana pasada, seis empleados que han trabajado o todavía trabajan con el motel Days Inn de Corpus Christi donde Selena murió de un disparo el 31 de marzo, apoyaron la posición de la defensa de que el disparo fué intencional.
Ellos testificaron que, después de dispararle a Selena, Saldívar la maldició y la persiguió, apuntandole con un arma.
Los testigos dijeron que la herida cantante corrió al recibidor del motel, gritando histéricamente y rogándoles que llamaran a la policía y hecharan llave a las puertas porque temía que Saldívar le dispararía otra vez.
Saldívar, quien fundó el club de admiradores de Selena y luego la ayudó a manejar sus tiendas de modas, firmó una confesión en el caso varias horas después del disparo. Si es convicta de asesinato, podría pasar el resto de su vida en prisión.
Durante las exposiciones iniciales el miércoles, el abogado asignado por la corte a Saldívar, Doug Tinker, le dijo al jurado que el arma "se disparó" accidentalmente mientras que su cliente la movía de un lado a otro hacia Selena cuando trataba de suicidarse. Después del disparo, Saldívar se metió en una camioneta en el estacionamiento del hotel y por nueve horas y media mantuvo paralizada a la policía mientras se llevaba el arma a la cabeza cada vez que se acercaban.
Tinker reconoció que los testigos del estado fueron importantes para el juicio, pero notó inconsistencias en su testimonio y dijo que todavía falta ver si el jurado les creerá.
"Siempre hemos concedido que el disparo que causó la muerte de Selena salió del arma que sostenía Yolanda", dijo. "Estos testigos son importantes para el caso del estado, pero habrán otros testigos".
El asistente del fiscal del distrito, Mark Skurka, comparó las discrepancias a cuatro personas que vieron el mismo accidente de tráfico y relataron cuatro historias un poco distintas acerca de él.
"Están diciendo la verdad", dijo. "Sólo vieron las cosas un poco distintas".
El testimonio más dañino para la defensa hasta ahora vino el jueves en la tarde cuando la mucama del motel dijo que oyó a Saldívar gritar, "Perra", luego de dispararle a Selena.
La mucama, Norma Martínez, al igual que otros dos empleados del motel testificaron que oyeron un disparo, luego vieron a Saldívar persiguiendo a la cantante. Ellos describieron a Saldívar como "calmada" o "normal" cuando se paró y caminó de nuevo hacia el cuarto 158.
El viernes, otros tres empleados del motel dijeron que una aterrorizada Selena tropezó dentro del recibidor del motel, gritando para que ellos cerraran con llave las puertas y llamaran a la policía. Cada uno dijo que ella identificó a Saldívar como su atacante, usando su nombre y el número de su cuarto.
La policía también testificó que Saldívar estaba lúcida y calmada durante su encuentro afuera del motel pero que se excitaba y amenazaba con suicidarse cuando trataban de acercarse a la camioneta roja en que estaba.
Esta semana se espera el testimonio de los policías que negociaron con Saldívar esa noche durante el encuentro en el estacionamiento y que tomaron sus declaraciones en la estación de policía.
Tinker probablemente atacará cualquier testimonio relacionado con la confesión que firmó su cliente, la cual él sostiene es, incompleta porque no incluye las declaraciones de Saldívar indicando que el disparo fué accidental.
El fiscal del distrito del condado de Nueces, Carlos Valdez, predijo que el estado concluirá su caso el martes o miércoles, y luego Tinker podrá tomar el centro del escenario.
Los abogados defensores hasta ahora se han negado a decir si llamarán a algún testigo. Cuando se le preguntó a Tinker si Saldívar testificaría, contestó, "Si lo supiera por seguro, no te lo diría".
Tinker también tendrá la opción de volver a llamar a tres testigos de la prosecución -- el padre de Selena, Abraham Quintanilla Jr.; su viudo, Chris Perez; y su hermana Suzette Quintanilla Arriaga -- quienes tomaron el banquillo de los testigos el miércoles, el primer día de testimonio.
En ese tiempo, Tinker no los cuestionó diciendo que reservaba su derecho de llamarlos más tarde.
Esta táctica mantuvo a los tres fuera de la sala del tribunal debido a reglas que prohiben a los testigos que oigan el testimonio de otros hasta que hayan terminado el suyo propio.
Si Tinker vuelve a llamar al padre-gerente de Selena, probablemente se enfocará en los rumores que rodean la relación de Quintanilla con sus hijos. Espera convencer al jurado de que había un conflicto entre la cantante y su padre y que Quintanilla es un pesado padre de estrella cuya necesidad de controlar a su hija creó la tensión que ultimadamente la condució hacia Saldívar y a su muerte.
El también podría tratar de culpar a Quintanilla por el estado mental de Saldívar demostrando que ella le temía tanto que compró la pistola para protegerse a sí misma de él.
La prosecución trató de ganarle la partida a Tinker la semana pasada haciéndole numerosas preguntas a Quintanilla acerca de sus relaciones familiares y sus acciones hacia Saldívar.
El rotundamente negó alguna vez haber amenazado a Saldívar o a su familia y repetidamente respondió, "No señor", cuando le preguntaron si alguna vez la había herido, violado, tenido relaciones sexuales con ella, cortado con un cuchillo o pagado a alguien para que hiciera esto.
